Las Escrituras
nos muestran la relación de mentoría entre Bernabé y Pablo en el transcurso del
libro de Hechos. Es interesante observar que Lucas, en muchos momentos, escribe
el nombre de Bernabé antes que el de Pablo. Es en casos aislados donde el
nombre de Pablo aparece escrito antes que el de Bernabé. Uno de ellos es lo que
la Biblia nos relata en Hechos 15, donde el nombre de Pablo aparece antes del
de Bernabé, siendo enviados al concilio de Jerusalén. En ese lugar, el nombre
de Bernabé vuelve a aparecer antes del de Pablo (Hechos 15.12).
Creo que hay una
interesante lección sobre liderazgo y mentoría. Para la iglesia local, Pablo ya
estaba listo para liderar, y por eso su nombre aparece antes que el de Bernabé
(Hechos 15.2). Pero para la iglesia en Jerusalén, especialmente para los
apóstoles, Bernabé era el líder que ellos conocían, y por eso es mencionado
antes que Pablo (Hechos 15.12). Pero lo interesante es que al finalizar el concilio,
el nombre de Pablo comienza a aparecer antes que el de Bernabé (Hechos 15.22,
25, 35) donde incluso en su iglesia local, Antioquía, son recibidos en este
orden. Una cosa es segura: Bernabé formó un líder reconocido para su iglesia
local.
Como escribiera antes,
Bernabé destacó por no brillar; destacó por ayudar a otros a destacar. Y este
relato de Hechos nos reafirma el llamado de Bernabé: formar líderes para el Reino
de los Cielos.
Es justamente
después que Pablo, liderando la iniciativa de un segundo viaje misionero, se
distanciara de Bernabé por causa de Juan Marcos. Y no solo eso, sino que
también el libro de Hechos deja de mencionar a Bernabé.
Bernabé ha de
haber visto en Juan Marcos un potencial que otros no lograron ver. Pero sin
lugar a dudas desarrolló con él una mentoría que transformaría a Juan Marcos en
un potente líder de la iglesia.
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Sobre él,
escribiré más adelante.
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